En el Perú, del total de las microempresas, el 44% pertenece a las mujeres, siendo el 20% para las pequeñas empresas y 23% para medianas. En cuanto a emprendimientos, debemos remarcar que América Latina y el Caribe tienen las tasas más altas de emprendimientos femeninos a diferencia de otras regiones. De igual forma, la brecha entre hombres y mujeres, es decir, la diferencia entre empresarios y empresarias es menor que en otras partes del mundo. Esta diferencia es especialmente relevante cuando se analizan los nuevos emprendimientos, en los cuales la brecha entre los géneros es del 24% en nuestra región, en comparación con el 43% en Asia y el 45% en Europa.
Es innegable el rol fundamental de las mujeres en la economía, constituyéndose muchas veces en la única fuente de ingresos del núcleo familiar. Sin embargo, al hablar de la fuerza laboral de las mujeres en el Perú, esta llega al 70% (de los cuales sólo el 50% se encuentra en el sector formal y 20% en el sector informal), mientras el empleo de los hombres llega al 91% (de los cuales el 50% corresponde al sector formal y el 41% al sector informal).
En el distrito de Ayna del Valle de los Ríos Apurímac y Ene – VRAE, 30 mujeres emprendedoras vienen desarrollando actividades lícitas, como el bordado de manteles, tejidos, manualidades y la crianza de animales menores, con el objetivo de generarse ingresos para cubrir los gastos de la canasta familiar. En este marco, la Municipalidad Distrital de Ayna, bajo la asistencia técnica de la institución CEDRO, viene promoviendo iniciativas lícitas dirigidas en mujeres de bajos ingresos económicos; con el objetivo es integrar empresas formales que mejoren sus ingresos y generen trabajo para los pobladores de la zona, poniendo en práctica sus habilidades y destrezas. De esta forma, se espera promover acciones lícitas que dejen de lado la influencia negativa del narcotráfico en la zona.
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